La alimentación es un acto que repetimos numerosas veces en el día, durante toda nuestra vida. Por ello, más importante que el contenido en el plato, es como me relaciono con su planificación, ingesta y disfrute. Veo la nutrición como un proceso de adaptación de qué como, y cómo lo como, pasando por cómo me siento con ello, y esto se traslada a mis consultas y a los cambios de estilo de vida de mis pacientes.